Una noche, Teo, un niño de tres años, le pide a su tío Daniel que le […]
Lea Vélez
Lea Vélez nació en Madrid, en 1970 al cobijo de una familia fanática de la literatura. Tras estudiar Ciencias de la Información en la Universidad Complutense, se licenció en periodismo en 1994. Pronto se dio cuenta de que además de escribir, le apasionaba el cine, así que decidió convertirse en guionista de ficción. Su tercera pasión es y ha sido siempre la música. Mientras recorría los pubs irlandeses del barrio Madrileño de Malasaña versionando a Dylan o Fleetwood Mac, terminaba su diplomatura en guión en la ECAM (Escuela de cinematografía y del Audiovisual de Madrid).
En 1996 recibió el segundo premio Terra-Antena 3 al mejor guión de largometraje por Como Las Olas -su primer guión de cine- y tras graduarse, comenzó a escribir, principalmente, para televisión. Hoy, las teclas de su ordenador cargan ya con más de seiscientas horas de ficción televisiva -sobre todo series diarias- entre las que se encuentran los éxitos de audiencia: La verdad de Laura o Luna Negra.
En 2004 se editó su primera novela, El desván (Ed. Plaza y Janés), escrita en colaboración con su amiga y co-guionista, Susana Prieto, de la que se publicaron seis ediciones. En 2006 repitió la experiencia de escribir a cuatro manos con su segunda novela, La esfera de Ababol (Ed. Planeta), una historia de aventuras, duelos y fervor por las palabras ambientada en los albores del siglo XIX. En 2008 escribió, también con Susana Prieto la obra teatral Tiza, divertida sátira de la educación, que fue galardonada en 2009 con el Premio de Teatro Agustín González. Sus dos novelas publicadas se han traducido al portugués.
Lea Vélez tiene fuertes lazos con Inglaterra que le hacen pasar largas temporadas en la ciudad de Brighton, donde encuentra inspiración junto al mar y buenos amigos con los que tocar su música en directo. Desde 2011 compone sus propios temas.
En 2014 ha publicado La cirujana de Palma en Ediones B y El jardín de la memoria en Galaxia Gutenberg.
English
Lea Vélez was born in Madrid in 1970 to a family fanatic about literature. She pursued Media Studies at the Universidad Complutense de Madrid and received her degree in Journalism in 1994, but soon thereafter she realized that she was most passionate about film and television; because of her love for audio-visual work and her love for writing, she proceeded to obtain a degree in screenwriting from ECAM (Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de Madrid).
Since 1996 when she was awarded a prize for her first screenplay, she has dedicated her career to writing for television. She is responsible for more than 600 hours of broadcast work. In 2004 she published her first novel, El desván [The Attic], with co-author Susana Prieto, an experience they repeated in 2006 with their second novel, La esfera de Ababol [The Sphere of Ababol]. Together they also wrote Tiza [Chalk], a prizewinning piece that won the Premio de Teatro Agustín González.
In 2014, she published La cirujana de Palma (Ediciones B) and El Jardín de la Memoria (Galaxia Gutenberg).
Lea Vélez habla de Lea Vélez
Nací, fui al colegio y no me gustó. Luego fui a la universidad y me gustó algo más, pero no demasiado. Después fui a la Escuela de Cine y eso me encantó, así que me puse a escribir para la tele y descubrí que las cosas más divertidas de la vida llevan muchas hora de trabajo. Siempre cierro las puertas de la calle al entrar en los sitios públicos, lo cual, yo creo, es una gran virtud. Soy puntual. Mucho. Mis amigos más íntimos se cuentan con los dedos de una mano. Le he construido a mis hijos una casa en un árbol y se la he llenado de libros y escribo varias horas al día. A veces, todas las hora del día. Excepto por la carpintería (afición que comparto con Harrison Ford), hago poco ejercicio porque me da una pereza espantosa, lo que indica que soy absolutamente normal. No me gusta nada ser cargante. Tampoco me gusta hablar demasiado. A veces soy cargante y casi siempre hablo demasiado. La ironía es el centro de mi lenguaje. Temo a Hacienda casi tanto como a los malentendidos. Hay días en los que creo que no tengo talento, que todo es inútil y otros en los que encuentro esa escritura brillante que es como la ola del surfista. Soy bilingüe y me siento más inglesa que española pero soy más española que inglesa. Hay quién me crítica esto lo cual yo creo que les describe a el,os más que a mi. Nunca he entregado un trabajo con retraso, nunca, porque me moriría de vergüenza. Creo que un personaje se define por lo que dice y por lo que hace. Una persona también. Me paso el día persiguiendo clichés y camuflo las canas con mechas rubias a la espera de tener el pelo blanco como mi madre. Quiero tener el pelo blanco como mi madre. Tengo antepasados judíos. Tengo antepasados visigodos. Desde hace unos años no me quejo casi, casi de nada. Quejarse es antipático. Sonrío mucho y me como las uñas con virtuosismo. No fumo, toco la guitarra y canto bien (esto igual es cargante). También sé querer, que es algo que a mucha gente se le da fatal. No soy muy alta y siempre seré leal a un amigo, incluso al amigo más traidor.
Obras
-
Mi querido extraterrestre
Lea Vélez, librosLea VélezDaniel tiene nueve años, es mitad inglés y mitad español, y no le gusta el colegio. Él preferiría estar aprendiendo otras muchas cosas que en la escuela le mencionan solo de pasada. A veces, Daniel se siente un poco fuera del mundo, y por eso graba mensajes para su amigo imaginario extraterrestre, Al. Cada día le habla de su divertida y peculiar familia, de las fantásticas ideas que se le ocurren, de los gatitos que se ha mudado a su jardín… ¿será́ cierto que hay un tesoro de la Guerra Civil enterrado en el patio?
-
La Olivetti, la espía y el loro
Lea VélezLea VélezDurante una mudanza, Lea Vélez encuentra varias cajas muy pesadas que llevan cuarenta años guardadas en la bodega de la casa familiar. Al abrirlas descubre que están llenas de cintas magnetofónicas. Julio Cortázar, Álvaro Cunqueiro, Mario Vargas Llosa, Susan Sontag, Carlos Barral, Marguerite Duras, Juan Larrea, Rafael Alberti, Italo Calvino, Jorge Semprún, Jorge Luis Borges, Paco Umbral, Juan Carlos Onetti o José Hierro, son solo algunos de los nombres de las carátulas. Las grabaciones pertenecen a su padre, Carlos Vélez, que durante los años de la Transición dirigió el programa de TVE Encuentros con las letras. Mientras Lea Vélez escucha las voces, angustias y anhelos de los protagonistas de la España cultural de la Transición, recuerda momentos clave de aquel ambiente literario que marcó su futuro. Gracias a los testimonios de cientos de escritores del pasado, la autora reflexiona sobre el presente cultural, la profesión de escribir, la animación a la lectura, el talento o la vocación. Vélez confecciona un bello tapiz de puntos de vista, tejido sobre la trastienda del programa literario que marcó una época: Encuentros con las letras.
-
La Cirujana de Palma
Lea VélezLea VélezUna mujer, un misterio, una isla, un crimen, dos amores
La cirujana de Palma es una novela policiaca, de amor, de personajes, que retrata elalma de una sociedad y de un trozo del Mediterráneo y que, de la mano de hombres ymujeres ingeniosos y sabios de los que ya nuca querremos separarnos, nos enseñaque vivir en la mentira, la de nuestras propias murallas defensivas, sólo sirve para nollegar nunca a la excelencia.
Palma de Mallorca, 1835. Tana de Ayuso llega a Palma de Mallorca como esposa del recién elegido médico forense de la isla. Pero ella es mucho más que una simple acompañante: entre sus muchos talentos destaca un olfato especial para esclarecer muertes sospechosas.
Tras instalarse en Can Belfort, una casona de piedra asomada al mar donde hace años se cometió un terrible asesinato, la protagonista se ve envuelta en la investigación de un viejo misterio, mientras aprende a abrir su corazón a la vida de la mano de dos amores.
Una camisa blanca agitada por el viento, un crimen que parece imposible, un comandante desertor, una niña que abraza a su muñeca en un palacio florentino y un doble juego de falsas identidades se mezclan con maestría sobre el azul del Mediterráneo y las finas arenas de la isla de Mallorca.
-
Nuestra casa en el árbol
Lea VélezLea VélezTras la muerte de su marido, Ana decide que la vida de ciudad, las mil extraescolares, los problemas educativos, los infinitos deberes repetitivos y la dislexia galopante de su hijo mayor son demasiado para ella. No puede más. No tiene tiempo para vivir del modo que el sistema le impone y a la vez estar con sus niños. Entendiendo que ella es la mejor «profesora de extraescolar» para ellos, decide romper con todo. Escapa de un mundo derruido y lleno de dolor, vende todo lo que la ata a Madrid y se marcha al sur de Inglaterra, al hostal inglés que su marido le dejó en herencia.
Allí, en Hamble-le-Rice, un bucólico pueblo de pedernal junto a la desembocadura del río Hamble, Ana crea un mundo de humor, un entorno irreverente y liberal, en una antigua escuela de carpintería situada en el borde mismo del agua.
Sus hijos, Michael, Richard y María, gracias a su vida en plena libertad, extraerán de sus aventuras y experiencias personales sus propias vocaciones y destinos, demostrando que la excelencia puede alcanzarse a través de la sencillez, sin sacrificar la infancia en favor del futuro.
-
La sonrisa de los pájaros
Lea Vélez, librosLea VélezSolo quien está dispuesto a conocer la verdad, puede llegar a encontrarla y descubrir la magia que esconde. Lea Vélez nos vuelve a ofrecer, con su nueva novela, una lección de vida.
Alma, periodista y escritora de treinta y cuatro años, regresa a Paraíso, la urbanización en pleno campo en la que vivió hasta la adolescencia, veinte años después de que un trágico accidente acabara con su felicidad familiar. Llamada por un impulso inconsciente, alquila la casa en plena naturaleza donde creció para tratar de reencontrarse con los recuerdos, en la esperanza de que sirvan de respuesta a sus preguntas vitales. El accidente de su familia coincidió en el tiempo con el terrible caso del “milano negro”, nombre que le dio la prensa al asesinato de una madre y sus dos hijos en los parajes naturales de Paraíso, un crimen del que se habló durante años, conmocionando al país, y por el que un hombre que podría ser inocente lleva veinte años en prisión. Alma decide escribir la historia de lo sucedido, hallando nuevos datos y entrevistándose con los protagonistas del drama. La búsqueda de la verdad la reconectará con Javier, un antiguo profesor del que estuvo enamorada, y que, debido a su afición a la cetrería, fue el primero en encontrar a las víctimas durante una de las salidas campestres con su halcón. Mientras Alma encaja las piezas del libro, reflexiona sobre las diferencias entre la realidad y la ficción, la inocencia y la culpabilidad, la necesidad que tiene el hombre de construir un relato hilado de unos hechos incomprensibles, quizá aleatorios, y se encontrará con su propia historia, descubriendo la naturaleza desbordante que la rodea, la verdad de su pasado y algo que jamás pensó llegar a conocer: el verdadero sentido del amor.
-
El jardín de la memoria
Lea Vélez, librosLea Vélez«Fue un otoño extraordinario. El otoño en el que tú me enseñaste a vivir y yo te enseñé a morir. Durante la última aventura, filosofamos, investigamos, leímos las viejas cartas de tu hermano Stephen. Las cartas que relatan una época y un pasado familiar. Gracias a una antigua foto en un sobre con matasellos de Sheffield, encontré respuesta a la dudosa paternidad de Gill. Me encanta hacer de detective. Las cosas de Stephen siguen en la buhardilla, metidas en sus cajas de bombones y a veces las saco y releo una poesía del cuaderno infantil. Allí, en la Inglaterra de 1957, estaban las respuestas y mientras yo escribía este Jardín transcribiendo cartas amarillas por el tiempo, tú lograste perdonar. Pienso en la sonrisa del otro protagonista de este relato: Francesc Boix. Te fascinó la vida del republicano español, testigo de Núremberg, fotógrafo de guerra. Yo te contaba sus hazañas, que están en esta novela y que no sé si es novela porque todo lo que se cuenta en ella sucedió de verdad.
Ese verano volvimos a Malmesbury. Tenías razón.
No existe un lugar con más encanto en Inglaterra. Los niños se disfrazaron de caballeros y cruzaron aceros de plástico en los jardines de la abadía. Hicimos un picnic. Entre saltos, tumbas de piedra, juegos y merienda, esparcimos tus cenizas bajo un roble centenario. Entro de nuevo en este otro jardín, El jardín de la memoria, ojeo sus páginas, riego con cuidado el primer beso que nos dimos y ese último que a veces es como el primero de un nuevo cariño real, invisible. Ahora estás hecho de un aire que empuja con constancia mi columpio. Subo y bajo, y veo más allá de los campos y de los tejados, entendiendo cómo hay que vivir. Tres años después de aquel otoño extraordinario, me siento plena, sabiendo que ganamos y que había que contarlo. Para demostrar lo que digo, aquí está nuestra historia.»
Una noche, Teo, un niño de tres años, le pide a su tío Daniel que le cuente un cuento. Pero Read more…
Una historiadora compra en un anticuario un maletín que contiene un manuscrito inédito firmado por la dramaturga, actriz y periodista Read more…
Una fábula moral con trazas detectivescas y científicas que indaga en el amor y la infidelidad. Una novela erótica y Read more…
Trackbacks and pingbacks
No trackback or pingback available for this article.
Leave a Reply